Mi Habana



Nos creímos que éramos una raza especial en el universo por lo que nos contaron, pero no fue así. Somos un pueblo como otro cualquiera. Tenemos soberbia, indiscreción, mala ortografía y al igual que el resto del mundo podemos hacer un poema por oler un poco de salitre de costa citadina.
La diferencia es como lo contamos.
Puedo decir que se que estás ahí, que no tienes tiempo pero vives porque te pienso a cada instante. Puedes ser un pedazo de tierra cualquiera, pero yo te hallo donde quiera que voy. Boston o Vladivostok tienen tu aire porque yo estoy ahí., lejos y cerca. Siempre dentro de ti, mi Habana. Llorándote, riéndote, mirándote, soñándote.
Mi habana.
Puedes ser tierra de cualquier parte del mundo, pero eres tierra de mi y por eso soy distinto. Porque te siento como cualquiera siente su tierra, pero te cuento de manera especial.
Mi Habana.